En este primer bloque
hemos trabajado el concepto de literatura. Al principio pensé que sería un
bloque más denso recordando mis experiencias pasadas con la literatura en el
instituto, pero en cuanto Irune empezó a hablarnos del tema supe que iban a ser
clases muy motivadoras e instructivas.
Comenzamos planteando en clase que era la literatura para
nosotros. Por su raíz etimológica, algunos dijeron que era la “palabra
escrita”, otros dijeron que cuentos e historias para entretener o enseñar.
La literatura es cualquier cuento que no nos enseña nada de
forma intencionada o, al menos, no es lo
que se pretende. Existen tres tipos de géneros dentro de la literatura: la
prosa (o narración), el verso (poemas), y el teatro (personajes y puesta en
escena).
Para que un texto sea literario, debemos tener en cuenta las
características que estudiamos en clase:
-Debe tener una función estética o
poética.
-Tiene que pertenecer a uno de los tres géneros
literarios.
-Presentar intencionalidad artística.
-Ficción: algo que no ha sucedido realmente pero que
se encuentra en el margen de la realidad).
Una vez explicadas estas características, Irune nos
explico que no siempre se cumplen. Al ver nuestras caras de asombro, nos
explico el concepto de paraliteraruta (que es a lo que ella se refería).
Nos explico que la paraliteratura tiene como función enseñar
o transmitir al niño de algún concepto al niño. Existen dos tipos de
paraliteratura: didáctica (enseñar) o moralizante (concienciar).
Por último, con la ayuda del cuento “El punto”, Irune nos
explico cómo se hacia un análisis literario de un libro y los diferentes
aspectos que deben tenerse en cuenta a la hora de elegir un determinado libro
para cada etapa de primaria.
El análisis literario me ha parecido una actividad muy
interesante, puesto que como maestra es una buena herramienta para seleccionar
aquellos libros que considere más apropiados para mis alumnos.
En mi opinión, la forma para transmitir la literatura a estas
edades es acercando a los niños a este mundo y hacerles formar parte de él. A
los niños la literatura no hay que metérsela en la cabeza. Debemos dejar que
exploren y sean ellos quienes se sumerjan u lean, se inventen finales e
historias paralelas, que dibujen a los personajes, etc.
En mis prácticas mi tutora le daba mucha importancia a la
lectura, pero he de decir que los niños de esa clase estaban faltos de
motivación y solo rellanaban una ficha muy técnica después de leer el cuento
que tocaba esa semana. Como he dicho antes, yo hubiera realizado otro tipo de
actividades posteriores a la lectura mucho más creativas.
Este bloque me ha
enseñado que el trabajo con la lectura es muy importante y hay que seguir incentivando
a los niños con el tema. Como maestros nosotros tenemos que estar preparados y
conocer un sinfín de fuentes y cuentos para contarles a los niños y plantear
diversas actividades con ellos. Pero antes de eso, ¡debemos continuar
preparándonos con el siguiente bloque ¡
Bien. Es una reflexión más superficial de lo que debiera ser.
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